La muerte del actor británico Alan Rickman, ocurrida ayer, ocupó importantes espacios en la prensa internacional. Rickman tenía 69 años y sufría de un cáncer, informó -entre otros medios- el diario “The Guardian”.

Además de sus trabajos en numerosas películas y en el teatro, se hizo popular en los últimos años por su papel como el inquietante profesor Severus Snape en la saga de películas de Harry Potter.

Sin embargo, su lista de papeles emblemáticos va mucho más allá. Él plantó cara a Bruce Willis como villano en “La jungla de cristal”, fue sheriff de Nottingham en “Robin Hood, príncipe de los ladrones”; dio lo mejor de sí en un bonito personaje en “Sensatez y sentimientos”, y fue la pareja perfecta para Emma Thompson en “Love actually”.

Rickman acumula casi 70 trabajos ante las cámaras, y ganó un Globo de Oro por su papel en la miniserie Rasputin.

Era diseñador gráfico
Su padre era irlandés pero él nació en Londres. Comenzó su carrera de actor profesional (después de formarse como diseñador gráfico) a los 32 años en la Royal Shakespeare Company. Su fama internacional comenzó a forjarse con su papel en “La jungla de cristal (1988)”, en la que interpretaba al malvado Hans Gruber, líder de una banda de terroristas que perseguía al policía John McClane (Bruce Willis).

La escritora J. K. Rowling pensó desde el principio en Rickman para que encarnara al profesor Severus Snape. Con el éxito de esta película llegarían más trabajos. Por su papel de sheriff en la película de Robin Hood consiguió el premio Bafta a Mejor actor de reparto. En “Love actually” interpretó al corrupto juez Turpin. En esa película se arriesgó a cantar.

En la piel de Severus Snape, Rickman se debatía entre el bien y el mal, acosado a su vez por el recuerdo de su primer y único amor, Lilly Potter (madre de Harry).